sáb 27 de abril de 2024

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Autos clásicos

El Volkswagen Golf que tuvo cifras de un Lamborghini

Te contamos la historia de uno de los concept más increíbles de VW, que pudo haber sido un icono global.

El Volkswagen Golf que tuvo cifras de un Lamborghini

El Volkswagen Golf es, hoy en día, uno de los autos más populares del mundo, y tiene todas las razones: nació como el reemplazo del "escarabajo" y en sus ocho generaciones recibió un tratamiento deportivo por un grupo de ingenieros entusiastas, adoptando las famosas siglas "GTI". Si bien hace algunos años existe una variante más deportiva del Golf (llámese "R32""R"), en la quinta generación a la marca se le fueron un poco las cosas de las manos y crearon una versión que estuvo por encima de todas: la "GTI W12-650". Te contamos su historia.

Volkswagen Golf GTI W12-650: historia

Todos los años, en Austria, se lleva a acabo un festival que gira en torno a la cultura de las siglas "GTI", y la propia Volkswagen a veces presenta algunos concepts que pueden llegar a la realidad o que simplemente permiten que sus ingenieros lleven su imaginación a niveles extremos.

Para la edición de 2007 de dicho festival, Volkswagen se propuso crear el Golf más radical de todos, por encima de los primeros eléctricos de los 70 (los CityStromer) o los "Syncro" con sus capacidades off-road; incluso uno que igualara o superara al Golf creado para escalar Pikes Peak, que usó dos motores para alcanzar una cifra de 650 CV.

De esta forma, la marca cumplió y presentó el "Golf GTI W12-650", basado en la quinta generación del hatchback, y su nombre ya nos dejaba en claro algunas de sus virtudes, ya que tenía un motor de 12 cilindros en W que producía una cifra máxima de 650 CV.

Para crearlo, Volkswagen tuvo que hacer toda una serie de modificaciones impresionantes: para empezar, el W12 era tan grande que no había manera de hacer que entrara en el vano motor, por lo que modificaron todo su chasis para ubicarlo en posición central, (que nos remonta inmediatamente a los Renault R5 Turbo y Clio V6), por lo que se eliminaron los asientos traseros y prácticamente todo el espacio de baúl (ni siquiera tenía portón trasero).

Para lograr mejores prestaciones y comportamiento dinámico, VW trabajó profundamente:

  • se reconstruyó la suspensión y la bajó 7 cm,
  • ensancharon las trochas, dándole 16 cm más
  • mejoraron los frenos y la dirección
  • le colocaron un kit aerodinámico funcional

El kit consistía en entradas y salidas de aire de gran tamaño, y era rematado por un ensanche descomunal de los guardabarros y paragolpes (el trasero contenía cuatro salidas de escape). Además, para conseguir buenas cifras y rendimiento, se le colocaron neumáticos de altas prestaciones, que calzaban las llantas exclusivas de 19”.

VW Golf W12: motorización y prestaciones

Ahondando en su tren motriz, el motor era el mismo que VW había desarrollado en el W12 Concept, y que ya usaba en el Phaeton, pero más específicamente es el que Bentley le puso al Continental GT.

El impulsor estaba compuesto por dos bloques "VR6" fusionados, logrando un desplazamiento de 6.0 litros, y gracias a sus dos turbos generaba 650 CV y 750 Nm. La potencia era entregada al eje trasero y la transmisión era automática de 6 velocidades.

En términos de prestaciones, el Golf W12 lograba el 0-100 km/h en solo 3,7 segundos (un GTI MK8 lo hace en 6,3) y su velocidad máxima ¡se limitaba a 325 km/h!. Todo esto quiere decir que un Golf tuvo cifras que sin problema podían competirle a un Lamborghini o una Ferrari.

VW Golf W12: ¿Qué pasó finalmente?

El concept del Golf W12 no era uno más, ya que no estaba hecho únicamente para ser exhibido en un stand, sino que los ingenieros de Volkswagen lo hicieron funcional y algunos miembros de la prensa de aquella época pudieron manejarlo en circuito.

Rápidamente, la presentación del Golf W12 hizo sonar las alarmas con su posible producción, pero a pesar de ser espectacular y funcional, la marca determinó que no sería más que un concept, ya que la gran mayoría de clientes de un Golf GTI no podían pagarlo, ya que hubiera sido un modelo caro en todos los aspectos, y al que sí le alcanzaba tenía que entender el valor real del vehículo y considerarlo como lo que es: una obra magnífica de VW. Claramente, tenían que coincidir muchos factores y a la marca no le cerraban los números. De haberse producido, este Golf hoy valdría fortunas, eso sin dudas.

¿Conocías el Golf W12? ¿Qué te parece?

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