A finales del año pasado, la cosa se ponía turbia para SsangYong, quienes cargan con una deuda de 55 millones de dólares. Mahindra, el fabricante dueño de SsangYong, tras los problemas causados por la pandemia del Coronavirus, decidió salvarse solo y no poner ni un solo Won más a los coreanos, obligándolos a rascarse con sus propias uñas y a conseguir comprador o financiamiento. La marca entró por segunda vez en el proceso de bancarrota y ahí nos quedamos, al menos hasta hoy.
La esperanza de Corea
La noticia viene del Nikkei Asia, quienes reportan que SsangYong podría tener un futuro comprador para dentro de poco, la startup coreana Edison Motors, quienes fabrican colectivos eléctricos hace seis años y que también están desarrollando camiones comerciales. El plan de adquirir a SsangYong va de la mano con los planes que tiene la marca de comenzar su proceso de electrificación, los cuales se alinean perfectamente con los desarrollos de esta startup. Así, SsangYong podría pasar a ser la facción de pasajeros del grupo y trabajar el plan de electromovilidad en conjunto.
Sin embargo, las razones por las cuales Edison Motors le ganó a otros dos postulantes fue el precio de la oferta, el potencial de recaudación de sus miembros y por supuesto, su hoja de ruta para los próximos años. Si todo sale bien, la transacción se realizaría a finales de noviembre por una suma cercana a los USD 260 millones, con lo que las deudas se pagarían rápidamente y Mahindra podría sacarse a SsangYong de encima. ¿Qué falta por resolver? Como SsangYong está en default, aún necesita la aprobación de la administración judicial para su venta.
¿Será por fin el golpe de suerte que necesita SsangYong? Ojalá la marca logre la estabilidad económica tan anhelada para seguir en marcha. Habrá que esperar que ocurre en las próximas semanas.
