dom 22 de diciembre de 2024

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Automovilismo

Bruce McLaren, un antes y un después en el automovilismo mundial

Conocé la vida del neocelandés que hizo historia en la Fórmula 1 y también en los prototipos.

Bruce McLaren, un antes y un después en el automovilismo mundial

En la historia del automovilismo existió un personaje de gran relevancia, que además de ser un gran piloto e ingeniero creó a una de las escuderías más importantes de la Formula 1, que a su vez derivó en una división encargada de fabricar vehículos de primer nivel, por lo que también realizó su aporte a la industria automotriz. Estamos hablando de Bruce McLaren, reconocido como piloto por haber ganado cuatro Grandes Premios de F1, campeonatos de Can-Am y las 24 horas de Le Mans, pero principalmente por fundar en 1963 Bruce McLaren Motor Racing Ltd, la compañía base de lo que hoy conocemos como McLaren.

Si bien apenas vivió hasta los 32 años, este neocelandés marcó a fuego la historia del deporte motor y sin saberlo tuvo su correlación en las calles, muchos años después de su muerte.

Los inicios

Nacido en Nueva Zelanda el 30 de agosto de 1937, Mclaren se formó como ingeniero mecánico mientras demostraba una excelente habilidad para manejar, lo que a finales de la década del cincuenta le permitió ganar una beca y dejar su país. Una vez en el extranjero, el joven piloto rápidamente se ganó el respeto del australiano Jack Brabham, quien ya era un reconocido piloto de Fórmula 1.

En 1959 y con 22 años, McLaren se unió a Brabham como su compañero de equipo en el equipo Cooper de F1. En ese mismo año y en su séptima competencia en la Máxima logró su primer triunfo, al ganar en Sebring, Estados Unidos. Con 22 años, 3 meses y 12 días, el neocelandés se convirtió en el ganador más joven en la historia de la categoría, récord que recién sería superado en 2003 por Fernando Alonso.

McLaren continuó con su racha ganadora en la Argentina, donde ganó la competencia que abrió la temporada 1960. En dicho torneo terminó como subcampeón de Brabham, en lo que fue su mejor faena en la F1. Luego debió esperar hasta 1962 para volver al escalón más alto del podio, año en el que ganó en Mónaco y concluyó el certamen en el 3er lugar.

El equipo propio

Con su habilidad para manejar pero también para construir, en 1966 McLaren emuló lo hecho por Brabham tres años antes: se armó su propio equipo de F1. Para ello, el nacido en Auckland desarrolló un auto basado en un Cooper, denominado Zerex Special y que durante 1962 utilizó Roger Penske en los Estados Unidos con mucho éxito. 

El inicio de este proyecto se dio algunos años antes del 66: antes de terminar 1964, McLaren compró el Zerex y ganó dos competencias en Inglaterra -no de F1- con el auto tal como lo recibió. Días después de la primera victoria, él y su pequeño equipo endurecieron la sección central de la carrocería con barras antivuelco y reemplazaron el motor cuatro cilindros de 2.7 L con un V8 de aluminio de 3.5 L derivado del Oldsmobile F-85. Luego desarrolló el diseño básico del primer auto que llevaría su nombre, el McLaren MIA, que si bien conservaba ciertas piezas de suspensión y dirección del Cooper poseía una carrocería nueva, compuesta por paneles de magnesio.

Tras varios años éxitosos, McLaren rompió con Cooper en 1966 y presentó su primer monoplaza de Formula 1, el Ford Indy M2A. Ese año también obtuvo una valiosa experiencia en ingeniería como uno de los principales pilotos de desarrollo del Ford GT40, que culminó en una victoria en Le Mans con su compatriota y compañero de equipo Can-Am, Chris Amon. Aquella edición de las 24 Horas fue recientemente retratada en la película Contra lo imposible, recomendada para todo amante de los fierros. 

Volviendo a McLaren, su primer auto de competición exitoso fue el M6A de Can-Am -1967-, creado por un retraso que tuvo con su programa de F1 del año siguiente: todo comenzó en 1966, cuando después de descartar el motor Ford original y a un sucesor italiano -Serenissima-, McLaren inició el certamen 67 con un impulsor BRM V12, pero los problemas de desarrollo dejaron el chasis M5A vacío durante meses. Aprovechando al máximo el tiempo de inactividad, el equipo creó el Can-Am M6A Group 7.

El éxito en Estados Unidos

 

El M6A sería el artífice de una temporada histórica para McLaren, la de 1967. Con Denny Hulme (campeón de F1 aquel mismo año con Brabham) como compañero de equipo, ambos ganaron cinco de las seis carreras del campeonato de Can-Am y McLaren se quedó con el título. Durante los próximos cuatro años la escuadra dominaría la categoría: en 1968 Hulme fue campeón de la mano del M8A, cuyo motor Chevrolet V8 de aluminio de 7.0 L se consolidó tras sufrir algunos problemas iniciales. En 1969 el equipo ganó las 11 carreras del torneo y McLaren consiguió su segundo cetro, mientras que al año siguiente Hulme hizo lo propio.

Más allá de su experiencia en Norteamérica, McLaren continuó compitiendo en Fórmula 1, donde en 1968 alcanzó su único éxito con auto propio, en el extenso y dificil Spa-Francorchamps belga. Un año después cerró su mejor tarea anual con la marca, al finalizar el certamen en la 3ª posición.

Desenlace fatal y legado

El 2 de junio de 1970 McLaren se trasladó al circuito de Goodwood, Reino Unido, a probar el nuevo M8D de Can-Am. En pleno ensayo, la carrocería con bisagras traseras se abrió de repente, situación que provocó que el vehículo se despistara a alta velocidad hacia unas defensas cercanas que por entonces cubrían un puesto de banderilleros. El accidente truncó su vida a los 32 años.

La escudería McLaren ya lleva más de medio siglo compitiendo en la Fórmula 1, donde consiguió 182 victorias, 12 campeonatos de pilotos y ocho de Constructores, por lo que es el segundo equipo más exitoso en la historia de la Máxima, solo superado por Ferrari

Pero la historia de la firma británica excede a la F1, ya que también sumó tres victorias en las 500 Millas de Indianápolis e incluso comenzó a producir vehículos de calle, desde la aparición del McLaren F1 en 1992. En 2010, la compañía formó McLaren Automotive, departamento que produce autos GT, super e hiperdeportivos y autos de competición para las clases GT4 y GT3.

¿Conocías la historia de Bruce McLaren? ¿Qué fue lo que más te sorprendió? ¡Contanos!

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