El KIA Stinger es uno de esos autos que enamoró a la prensa, pero no tanto al mercado. Es cierto, cuando irrumpió en escena la expectativa a su alrededor fue poco menos que grandiosa. Incluso los galardones no se hicieron esperar. Y en verdad, creéme cuando te digo que su manejo es grandioso. Es un auto con alma, brío y que transmite confianza al mismo tiempo.
KIA se animó a enfrentarse a las marcas premium con este auto que con un precio similar era mucho más grande, potente y equipado. Pero, en un mundo donde se le da mucha importancia al emblema, no todos están dispuestos a “bajarse” de su premium alemán hacia un KIA, no importa que tan bueno sea. Tampoco hay que olvidar que las SUV siguen dominando con puño de hierro el mercado.
Esto en conjunción con otros factores, como la irrupción de su primo el Genesis G70, catalogado como un producto todavía más redondo, han mermado las ventas del KIA Stinger. La tendencia a la baja viene desde 2018, pero en este 2020, disminuyeron aún más. Y sí, la crisis sanitaria del coronavirus covid-19 podría ser la estocada final.
Sin embargo, aún falta mucho para que el ciclo comercial del Stinger finalice, por lo que KIA aprovecharía su próxima actualización de media vida para darle una bocada de aire fresco y con ello una última oportunidad.
Se dice que el facelift del Stinger actualizará el actual V6 de 3.3 Litros biturbo dotándolo de un poco más de poder. Aunque, también se rumora que la apuesta de KIA podría ir más allá y podría sustituirlo a favor de un 3.5 litros, también biturbo y que en la actualidad es usado en los Genesis GV80 y G80. Obviamente, todo esto vendrá acompañado de una renovación estética y de equipamiento.
¿Te gustaría que el Stinger se salvara de la guillotina?
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