El gigante chino BYD, uno de los líderes mundiales en fabricación de baterías y sistemas eléctricos, lanzó su nueva "Blade Battery", desarrollada específicamente para resolver los problemas de seguridad asociados a las baterías de los vehículos eléctricos.
La empresa aseguró que durante su desarrollo la Blade Battery superó con éxito diferentes pruebas de calidad. Por ejemplo, se sometió a una prueba extrema de perforación, en la cual no largó ni humo ni fuego después de ser perforada, mientras que su temperatura superficial se mantuvo entre los 30° y 60° C. Bajo la misma exigencia, una batería similar de litio excedió los 500° C y se incendió, mientras que otra de fosfato de hierro y litio alcanzó una temperatura de entre 200° C y 400° C en la superficie, aunque no llegó a tomar fuego.
Otras pruebas a las que fue sometida la ‘Blade Battery’ implicaron aplastarla, doblarla, calentarla en un horno a 300° C y sobrecargarla un 260%. Al final de todo este trato extremo ninguna unidad explotó o se incendió, por lo que en caso de un accidente grave los vehículos eléctricos equipados con dichos dispositivos serían mucho menos susceptibles a incendiarse.
En los últimos años, los fabricantes de autos eléctricos se empeñaron en aumentar la autonomía de sus baterías, pero el incremento en la capacidad de estas generó que aumente en forma crítica la densidad térmica, lo que las hizo vulnerables.
"Actualmente, muchas marcas de vehículos reconocieron que quieren adoptar la tecnología de la ‘Blade Battery’ por la seguridad que ofrece. Con gusto compartiremos y trabajaremos con socios globales para lograr resultados mutuamente beneficiosos para todos los actores de la industria”, indica He Long, Vicepresidente de BYD.
El primer modelo en equipar la flamante batería será el sedán Han EV, a lanzarse en junio próximo. Este se convertirá en la punta de lanza de la familia Dynasty de la marca, al ofrecer un rango de autonomía de 600 kilómetros, mientras que será capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en solo 3.9 segundos.
