dom 22 de diciembre de 2024

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Tips y Consejos

Malas costumbres que dañan nuestro vehículo

Hacemos un recorrido por los errores comunes y dañinos a la hora de manejar un auto

Malas costumbres que dañan nuestro vehículo

El mundo se podría dividir entre los que cuidan a los autos y los que no. En esta nota te aconsejamos qué tenes que tener en cuenta para no cometer esos errores tan frecuentes como nocivos, que dañan seriamente a tu vehículo y le restan años de vida útil.

Manejar con el tanque en reserva

Es probable que nos parezca algo insignificante circular con el tanque en reserva, pero el hecho es que se podría dañar una pieza muy costosa como es la bomba de nafta. Puntualmente se desgasta por sobre exigencia y también porque llegan las impurezas acumuladas en el fondo del tanque.

El peso muerto de la mano en la palanca de cambios

¿Quién no maneja con la mano apoyada siempre en la palanca de cambios? Este es otro error muy común entre conductores y lo cierto es que el peso de la mano, aunque no nos demos cuenta, le genera un desgaste mayor, desajustes en su mecanismo y la posible rotura de la misma, sino su deformación.

Presión de aire insuficiente en los neumáticos

Si no tenemos la presión correcta en las ruedas de nuestro auto desconocemos todo el mal que le hacemos: desgasta mucho antes de tiempo la banda de rodadura; incrementa las vibraciones que dañan la parte central del vehículo (sobre todo los amortiguadores); le quita adherencia al suelo; le saca el correcto dinamismo que tiene cada vehículo; y como si fuera poco nos hace gastar más porque aumenta el normal consumo de combustible.

Uso indiscriminado y/o incorrecto del embrague

Otro aspecto usual entre conductores es usar el embrague hasta cuando no hace falta, por ejemplo, cuando lo mantenemos pisado con la primera engranada para no perder un segundo cuando el semáforo de la luz verde. Lo mismo sucede durante la marcha, no dejes el pie sobre el pedal, aunque no te des cuenta esa ligera presión desgasta prematuramente al embrague. .

Girar el volante con el auto quieto

Esta quizá no sea la más común de las malas costumbres, pero sí al hacerlo reducimos la vida útil de la bomba además de los neumáticos.

Pasar lomas de burro a gran velocidad

No reducir la velocidad en reductores (lomas de burro o similares) o mismo hacerlo de la forma clásica (“de costado” o inclinado en sus laterales, repartiendo el peso de la carga del auto de forma incorrecta) dañan seriamente a las suspensiones y neumáticos de los vehículos. Se recomienda no pasar lomas ni badenes a más de 15km/h.

Manejar el auto con el motor frío o con sus fluidos con niveles bajos

Si bien con las nuevas tecnologías aplicadas a los vehículos es menos preocupante, es recomendable esperar aunque sea unos segundos para que el aceite (que bajó al cárter por gravedad) sea bombeado y llegue a todo lugar que requiera lubricación, evitando así un desgaste mayor al esperable.

Frenados excesivos y/o repentinos

Mantener las distancias con otros autos y anticiparse a las maniobras son buenas formas de prevenir un rápido desgaste de los frenos. Dependiendo del contexto soltar el acelerador o hacer un rebaje puede ayudarnos a reducir la velocidad sin tener que usar los frenos en situaciones que no lo ameritan.

Manejar muy rápido o muy lento

La transmisión, el turbo y el cigüeñal del motor se desgastan incorrectamente si manejamos de forma excesivamente pausada, esto es cuando no llegamos a determinadas revoluciones por minuto. Mientras que el motor, la amortiguación, la transmisión y los frenos, se verían perjudicados si manejamos de forma brusca y a grandes velocidades.

Estacionar de costado al auto por encima de los cinco centímetros del suelo

Una de las costumbres más populares es estacionar con medio auto sobre la vereda cuando se quiere reducir el espacio que ocupa. Esto produce que quede inclinado apoyando todo su peso en dos ruedas lo que desgasta tanto a los neumáticos que se apoyan en el asfalto, como sus llantas, rótulas y suspensiones.

Estacionar sin el freno de mano y dejando el cambio puesto

Es probable que te resulte una obviedad, pero al estacionar el auto dejando un cambio puesto sin usar el freno de mano, obliga a la caja de cambios a absorber toda la fuerza que mantiene quieto al auto.

De todas estas malas costumbres al manejar, ¿con cuál/es te identificas?

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