Toda la tecnología que tienen los autos actuales hace la vida más fácil y placentera para los conductores y pasajeros. Sin embargo, ciertos elementos pueden ser vulnerables a un ataque cibernético. Hace unos años te contamos, justamente, de un Jeep hackeado en Estados Unidos.
Un ejemplo de esto son las llaves remotas de los vehículos, que pueden ver su código copiado y con ello tener acceso a la apertura de puertas y al arranque del motor del auto para robarlo.
Ante esta situación, diversas compañías de ciberseguridad están trabajando con 14 fabricantes de automóviles para crear protecciones que logren evitar estos problemas. Como parte de esta plan, las empresas intercambian información para rastrear y analizar posibles amenazas cibernéticas y vulnerabilidades.
Pero comos siempre, no faltan los remedio caseros, ¿y qué dicen éstos? Que lo mejor es guardar las llaves en una lata de metal. De acuerdo con los especialistas, esto produce el efecto “Jaula de Faraday”, que bloquea el campo electromagnético. Con esta medida es imposible que los hackers tengan acceso a los códigos de las llaves... así que ya sabes: nada de llaveros, todo a la lata.
