Así como existen personas que ven a el manejo como un placer, hay a quienes sufren ansiedad y bloqueos frente al olante. Este miedo a manejar se llama amaxofobia, y es mucho más común de lo que pensamos.
Amaxofobia
En pocas palabras, la amaxofobia (de amaxa/ἄμαξα, carro en griego) es la fobia a conducir un vehículo. Este miedo se puede presentar tanto en el manejo propio como en el de los demás conductores. La falta de práctica, los accidentes, la edad y otros factores peuden ser el orígen de este aversión al manejo.
Según estudios, la amaxofobia es mucho más común en personas mayores de 40 años y en las mujeres, aunque algunos advierten que es común que la presión social haga que los varones no admitan el miedo, reprimiéndolo y derivando en situaciones peores.
¿Cómo superar el miedo a conducir?
Como todas las fobias, la amaxofobia puede superarse por medio de un tratamiento adecuado. Antes que nada, los primero es identificar y reconocer el problema, así como decidir que se quiere perder el miedo a conducir. Una vez que se detecta y acepta la amaxofobia, el siguiente paso es buscar ayuda psicológica para poder vencer al miedo.
Un apropiado tratamiento psicológico no solo permite saber cómo superar el miedo a conducir, sino que también ayuda mediante distintas técnicas a ir eliminando ciertos miedos concretos al volante. Luego se trabaja con ejercicios y técnicas de autocontrol, y finalmente se elabora un plan de enfrentamiento gradual.
Ciertamente, conducir sin miedo toma tiempo, para algunos más que para otros. Con una buena guía psicológica, los nervios y la ansiedad podrán esfumarse por completo, recobrando la confianza y la seguridad para manejar sin miedo alguno.