Uno de los tantos autos que se pusieron a la venta durante la XLVII Subasta anual de Scottsdale, es este Mercedes-Benz 770K Grosserm Offener Tourenwagen de 1939. Lo interesante de este vehículo no es sólo su antigüedad y estado de conservación, sino también que fue usado por una de las personalidades más infames de la historia: el creador del partido nazi, Adolf Hitler.
Este auto, también conocido como “Super Mercedes”, es ofrecido por la casa de subastas Worldwide Auctioneers y tiene un valor sumamente importante, ya que más allá de su dueño, es considerado uno de los autos más bellos de la historia alemana. A pesar de ello, nadie ofertó la puja mínima, por lo que el coche se quedó sin comprador.
El Mercedes-Benz 770K Grosserm Offener Tourenwagen blindado es muy raro de encontrar, debido a que Mercedes-Benz sólo construyó un total de 88 unidades, de las cuales sólo sobreviven cinco. De esta última cantidad tres pertenecen a colecciones privadas. El modelo emplea un motor de ocho cilindros en línea sobrealimentado de 7.7 L productor de 230 CV. La caja es de cinco relaciones y es capaz de superar las los 160 km/h.
Tras el fin de la Segunda Guerra Mundial, este Mercedes-Benz 770K con el número de chasis 189744 fue incautado por Estados Unidos para luego pasar por varios propietarios e incluso estuvo resguardado en un garaje por varios años en la década de los 70' para luego ser restaurado y de nuevo pasar a la venta.
De acuerdo con Worldwide Auctioneers esta pieza de colección puede superar los USD 2 millones, pero más allá del precio... ¿te sentarías en un auto sabiendo que sobre él estuvo uno de los mayores genocidas de la historia?
