Antes de que la actual generación del Ford Focus RS diga adiós en coincidencia con la nueva generación del Focus, Ford Performance ha producido una versión exclusiva que se destaca por algunas mejoras en el diseño exterior e interior, así como la incorporación de un diferencial delantero de deslizamiento limitado.
Aunque a nivel estético mantiene el mismo estilo obtenido por los elementos aerodinámicos y el color negro que vemos en el techo, las carcasas de los espejos, el spoiler, la parrilla y las llantas de 19"; esta edición limitad agrega una tonalidad roja más furiosa, además de la clásica azul.
En cuanto a la motorización, el EcoBoost de 2.3 L genera las mismas 350 CV y 475 Nm pero gana un manejo superior gracias al diferencial delantero de deslizamiento limitado que nombramos previamente. Este componente mecánico reparte mejor el poder a la rueda delantera con mayor grip, lo que se traduce a una mejora sustancial de la aceleración al salir de una curva, al mismo tiempo que mejora la estabilidad del vehículo.
El interior reluce con la fibra de carbono en las puertas, el freno de mano y el medidor de presión del turbo. Por otro lado tenemos asientos delanteros con calefacción y en el caso del que le pertenece al conductor, cuenta con un ajuste eléctrico de ocho posiciones. También tiene calefacción el volante y los espejos exteriores, además de contar con un sistema de navegación activado por voz.
Para darle la exclusividad, este vehículo solo tendrá 1.500 unidades lanzadas, la mayoría en Estados Unidos.
Si bien el motor
