Además de actualizar al Clase S y mostrarlo en Shanghái, la marca exhibe también las nuevas variantes deportivas de AMG, los S63 y S65. Con una estética novedosa en toda la gama, lo que se lleva más miradas es que el viejo motor V8 5.5 litros biturbo fue reemplazado por uno más pequeño, un V8 4.0, también biturbo, que aumenta la potencia en 26 CV y reduce los consumos para llevarlo a 8,92 L/100km en ciclo mixto.
Con este "boost" de un 5% más de poder, el Mercedes-AMG S63 eroga 603 caballos de fuerza en lugar de los 577 anteriores, mientras que el torque se mantiene en 900 Nm, además de que el motor incorpora tecnología de desconexión de cilindros y ahora se acopla a una caja de nueve cambios en lugar de la anterior 7G-Tronic. Según la marca alemana, el control de largada es más sencillo de utilizar, pudiendo usarse en modos Sport y Sport+, llevando al S63 de 0 a 100 km/h en sólo 3,5".
Por su parte, el S65 AMG mantiene el V12 6.0 turbo con 621 CV y 1.000 Nm asociado a la caja de siete relaciones que es notablemente más pesada que la nueva transmisión, ofreciendo una aceleración de 0 a 100 km/h en 4,3".
Galería de Mercedes-AMG S63Ir a la galería
1
12
