Los ricos y famosos que aman los autos disfrutan de sus fortunas personales con colecciones magníficas y vehículos lujosos. Cristiano Ronaldo, Rowan Atkinson o Neymar son algunos ejemplos de ello. Pero también puede suceder que en el afán de divertirse con sus coches, sufran algún que otro accidente como en el caso de Nick Mason, el baterista de Pink Floyd, que arruinó ni más ni menos que un McLaren F1 GTR, valuado en alrededor de USD 10 millones.
El accidente ocurrió en el famoso circuito de Goodwood, en Reino Unido, una mítica pista creada en la Segunda Guerra Mundial, y en la cual triunfaron figuras de la talla de nuestro José Froilán González con una Ferrari 375, Sir Stirling Moss con un Cooper T-51 Climax y Jim Clark a bordo de un Lotus 24-BRM. Durante la vuelta rápida, Mason perdió el control del McLaren F1 GTR y éste se iría al pasto y para finalmente chocar duramente contra el muro de protección.
Afortunadamente, Mason salió ileso de este fuerte accidente y su auto podrá ser reparado, aunque claro, deberá desembolsar una buena cantidad de dinero.
Another McLaren in the wall
