Esta controvertida decisión proviene del intento por combatir los altos índices de contaminación que afectan a la ciudad. Dicha regulación entrará en vigor a partir del 31 de marzo de 2016 en Delhi y las regiones circundantes.
La decisión se produce poco después de que el Tribunal Nacional Verde de la India ordenara una prohibición sobre el registro de todos los vehículos diésel durante un mes. Todo esto con la finalidad de ayudar a limpiar el aire en Delhi, una de las ciudades más contaminadas del mundo.
Otras resoluciones también prohíben la entrada de camiones con más de 10 años de edad a la ciudad, además de que exigen a los taxis de Delhi, incluyendo Uber y Ola local, a convertir sus unidades para que funcionen con gas natural comprimido.
Sin embargo, y aunque esta podría ser una decisión trascendental para la región, Mercedes-Benz, un jugador activo en el mercado automotriz indio comentó que esta regulación podría afectar las futuras inversiones en el país: “debemos tener en cuenta la pérdida de puestos de trabajo en concesionarios y los vendedores que producen los motores diésel”.
De acuerdo a datos de TimesOfIndia, más del 23% de los autos en las calles de Delhi son diésel. La ciudad cuenta con 8.5 millones de vehículos y 1.400 vehículos nuevos se añaden a sus calles todos los días.
Buscan eliminar contaminación en Nueva Delhi
