En honor al 50 aniversario de la carrera inaugural de la Can-Am Series, McLaren desarrolló esta edición especial que lleva por nombre 650S Can-Am.
Antes de entrar en detalle, es importante mencionar que la Can-Am Series, o Canadian-American Challenge Cup, que vio la luz en 1966 fue una de las categorías más alucinantes de la historia del atomovilismo, con potencias astronómicas que fue dominada por McLaren y atrajo a los mejores pilotos de la época quienes disputaron épicas carreras en los principales circuitos de Estados Unidos y Canadá.
Volviendo al McLaren 650S Can-Am, esta edición limitada a 50 unidades es obra de los técnicos, ingenieros y diseñadores de McLaren Special Operations (MSO).
Uno de los sellos distintivos de este auto es el uso de fibra de carbono para la fabricación del capó, las ventilaciones, el splitter, la parte central del paragolpes trasero y las puertas. Sin duda, lo que más llama la atención es el techo retráctil, también de carbono, algo inédito en un McLaren. Complementa este trabajo exterior un juego de llantas en negro, muy al estilo de la década del 60, y el sistema de escape de acero inoxidable.
Para el interior, McLaren Special Operations decoró con fibra de carbono varios de los componentes del tablero y paneles de las puertas, además de colocar asientos deportivos tapizados con cuero y alcántara, y una placa de identificación.
Donde no existe variación alguna es en el V8 bi-turbo 3.8 litros que produce 650 CV. Esto es suficiente para llevar el velocímetro de cero a 100 km/h en apenas tres segundos y conseguir una máxima de 329 km/h.
