Si estás pensando que Mercedes-Benz enloqueció ante la idea de producir un vehículo tan “mundano” como una pick-up, recordá que, más allá de sus vehículos premium, la marca es fuertísima en el mundo de los vehículos laborales. Por otra parte, las pick-ups hace años que dejaron de ser meros productos de trabajo.
La casa de la estrella anunció que para 2020 tendrá en el mercado una pick-up que atacará al segmento mediano donde actualmente militan productos como las Chevrolet S10, Ford Ranger, Nissan Frontier, Mitsubishi L200, Toyota Hilux y Volkswagen Amarok, entre otras. La idea de Mercedes-Benz es que su producto sea premium y para ello tenemos este bosquejo con una carrocería estilizada que recibiría motores nafteros y turbodiésel de 4 y 6 cilindros, en su mayoría asociados a cajas automáticas.
Obviamente se espera que tenga todos los dispositivos de confort y seguridad de la marca, interiores con el estilo de sus productos civiles y de trabajo, y una amplia capacidad de carga. Al parecer, habrán versiones más refinadas y otras más enfocadas al uso laboral.
Lo más interesante es que el proyecto pertenece a la división de vans de Mercedes-Benz, la misma que produce las Sprinter (y en breve el Vito) en Argentina, lo que quiere decir que no es descabellado pensar en la producción local de su próxima pick-up. Además de la planta de Virrey del Pino, refuerzan esta idea el potencial de mercado del Mercosur y la experiencia de nuestro país en la producción de este tipo de vehículos.
Una gran duda será su nombre ya que la marca está migrando hacia las denominaciones de tres letras para sus todoterrenos y SUVs con GLS (ex GL), GLE (ex Clase M), GLC (ex CLK) y GLA de la plataforma del Clase A. Solo el Clase G conserva una letra. ¿Llamarán a la nueva pick-up GLP?
