La escuadra italiana atraviesa un difícil presente y arrancó en forma oficial la temporada el fin de semana pasado en Australia no exenta de problemas. Tanto Fernando Alonso como Felipe Massa quedaron afuera del Top Ten en clasificación; el español se recuperó en carrera para culminar quinto pero su ritmo no era el mismo que el de los líderes. El brasileño desertó la final tras un polémico entrevero con Bruno Senna.
Apenas una semana separa la fecha inicial de la segunda cita del campeonato 2012. Ya superado Melbourne y con Sepang a la vista, Alonso es consciente que no puede esperar que las cosas sean fáciles para Ferrari y el trámite de la temporada parece complicarse progresivamente para la Scuderia.
"En Malasia correremos a la defensiva otra vez", contó a través de la web del team. "No hay otra manera, dado que el F2012 está prácticamente igual al que pusimos en pista en Albert Park. Trataremos de adaptarlo lo mejor que podamos, sabiendo que no será fácil", sentenció el asturiano.
"Hay dos puntos que tendremos que trabajar con especial atención: encontrar el compromiso justo en términos del balance aerodinámico y la degradación del neumático. Sepang tiene dos rectas muy largas donde la falta de velocidad final cuesta más caro que en Melbourne, donde las dos rectas en donde se puede usar el DRS son razonablemente cortas", agregó.
Tampoco le da demasiada importancia al pronóstico del tiempo para el fin de semana, que sugiere que la lluvia también acompañará a la Fórmula 1 tanto sábado como domingo. "No hay otro lugar en el mundo adonde vaya la F1 en donde el tiempo pase de un sol radiante a una lluvia torrencial en pocos minutos, ni siquiera en Spa-Francorchamps. En boxes deberán estar atentos al radar y estar listos para cualquier cambio climático", afirmó.
En tanto, Felipe Massa tendrá chasis nuevo este fin de semana en el Gran Premio malayo, en un intento de Ferrari de salir del pozo en el que se encuentra. El piloto sudamericano fue blanco de numerosas críticas tras Australia, debido a su magra clasificación y a los "infantiles errores" que cometió durante la final antes de parar.
Aunque el equipo apuesta fuerte al brasileño y confía en que puede revertir su situación, la escudería de Maranello decidió efectuar el cambio inmediatamente luego de pasar por Melbourne, por lo que este fin de semana correrá con el chasis número 294, para determinar si es un factor clave en la performance.
De acuerdo a la versión oficial publicada en el sitio oficial de la escuadra rossa, la explicación fue que "esta decisión tiene que ver con la intención de despejar dudas sobre el rendimiento inusual del auto durante el pasado fin de semana en Albert Park".
Fuente: CORSA
