El patrón de la Fórmula 1 aseguró que son necesarios nuevos mercados y esta parte del mundo se candidatea seriamente para cumplir con las necesidades que se plantean a futuro. La crisis que azota al mundo, especialmente a Europa, hace que el Viejo Continente vaya en baja y obligue a los organizadores del Campeonato del Mundo a buscar otros destinos.
El continente asiático da cuenta de la expansión de la categoría más importante del automovilismo mundial, con las nuevas plazas incorporadas en los últimos tiempos, como la India, Singapur con circuito callejero de noche, y la más importante quizás es Abu Dhabi, producto de una megainversión gracias a la cual un circuito de primer nivel se emplaza en medio del desierto árabe.
Estados Unidos es la novedad en materia de plazas a visitar. El país norteamericano vuelve a estar incluido en un cronograma anual con la incorporación del Gran Premio de Austin en Texas, y para 2013 se suma el circuito urbano de Nueva Jersey.
Ecclestone no dudó en admitir la desigualdad en la distribución de fechas para el torneo de cada año: "Quizás haya demasiadas carreras en Europa. Ya no somos un campeonato de Europa, somos un campeonato del mundo. Y debemos estar en todas las partes del mundo", aseguró.
"Está claro que nos faltan carreras en Latinoamérica y estamos mirando atentamente esa parte del mundo", deslizó. El único país de la región que alberga a la Fórmula 1 es Brasil, con el Gran Premio de San Pablo. Por lo tanto, se abren las posibilidades a otros escenarios, como Argentina o México. Nuestro país fue anfitrión en 21 oportunidades, la última en 1998; México organizó 15, siendo el último en 1992.
Las declaraciones del mandamás de la Fórmula 1 encienden una pequeñísima luz de esperanza en la Argentina. Históricamente, el Autódromo de Buenos Aires fue el lugar por excelencia que recibió al Gran Premio; en los últimos años otros circuitos como Potrero de los Funes y Termas de Río Hondo se levantaron y figuran como posibles candidatos. Coincidentemente, el anuncio de Ecclestone llega mientras el Coliseo capitalino cumple 60 años. Si la inversión que corresponde se concreta, podría volver a sus épocas gloriosas...
Fuente: CORSA
