Durante el año pasado existieron muchos preparadores de motos eléctricas que desaparecieron tan rápido como las cargas de las pilas que usaban, pero nacieron algunos entusiastas que continuaron, tal es el caso de Swigz que a finales del 2010 presentó su primer diseño funcional.
En aquella primera entrega se dio a conocer un extraño modelo que parecía tenía una caja de carga en la parte trasera, la cual albergaba el espacio de las baterías, algo poco usual ya que cambiaba dramáticamente el centro de gravedad de la moto sin contar con los movimientos laterales durante el curveo.
Luego de ese día se propusieron participar en el campeonato norteamericano llamado WERA Heavyweight Twins Superbike, donde compiten motos Super Stock (unidades de serie, con ligeras modificaciones de seguridad) de cilindradas 1000cc, como lo es la Ducati 1198 o la KTM R8.
Dicha competencia se celebró el pasado domingo 9 en el circuito de Fontana, donde se realizaron mejoras en la moto, ya que el peso de las baterías se pudo distribuir desde la parte baja del asiento hasta lo que sería el tanque de gasolina, lo cual mejoró su manejo y de paso la estética de la unidad.
Dicen que una imagen vale más que mil palabras pero aquí los videos valen todo y podemos ver con una cámara a bordo de la moto el recorrido que tuvo para llegar a la segunda posición de la carrera dos del fin de semana.
En dicho video podemos sacar dos conclusiones, la aceleración de la moto “de pilas” que genera 193hp es... si me permiten el termino, brutal, sobrepasando en las rectas a las demás a gasolina. Por otra parte el sonido que nos regala es algo extraño, algo no escuchado antes para una máquina de competencias que será puesto a debate durante mucho tiempo hasta que nos logremos acostumbrar.
¿A ti que te parece?