El Laboratorio de Seguridad Volvo, cumple su décimo aniversario. Fue inaugurado a principios de 2000 y sigue siendo uno de los más avanzados de la industria automovilística.
La última incorporación consta de una serie de cámaras digitales que logran captar 200.000 secuencias por segundo y así analizar los choques desde sus detalles más precisos.
Asimismo, se incorporaron cámaras miniatura dentro de los vehículos para registrar todo lo que sucede en el momento en el que se producen las colisiones.
Para la realización de las pruebas, este laboratorio cuenta con una pista fija y una movible, lo cual permite realizar una gran variedad de experimentos teniendo en cuenta diferentes velocidades, ángulos e impactos con un grado de precisión sorprendente.
Además, las pruebas de impacto se pueden realizar en ambas pistas en direcciones opuestas y contra una variedad de objetos que simulan al tráfico real.