Hijo de uno de los más grandes pilotos italianos de antes de la Segunda Guerra Mundial, Alberto Ascari se convirtió en uno de los pilotos de Fórmula 1 más aclamado y dominante de este deporte.
Destacado por su precisión y buen juicio, hicieron de él un destacado piloto en una de las más peligrosas épocas de este deporte. Falleció en un fatal accidente, en circunstancias similares a las de su padre.
Alberto Ascari, nació en Milán (Italia) el 13 de Julio de 1918, contaba sólo con 7 años cuando su famoso padre Antonio Ascari, vigente campeón de Europa, fue asesinado mientras abandonaba el Gran Premio de Montlhery.
Por aquel entonces, el pequeño Alberto se encontraba completamente inmerso en la vida de su padre, conocía a los pilotos más importantes, incluido a Enzo Ferrari, amigo personal de su padre.
Tras la trágica pérdida de su padre, Alberto se entregó de lleno a la vida de las carreras. Su famoso apellido le ayudó en sus comienzos, que fueron sobre las dos ruedas a los 19 años de edad, el equipo de motocicletas Bianchi le ofreció un puesto en su equipo.
Su primera participación sobre las 4 ruedas, no sería hasta 1940 en la Milla Miglia, donde Enzo Ferrari le permitió pilotar un Tipo 815 Spyder. Cuando Italia entró en la Segunda Guerra Mundial, el taller que Acari poseía en Milán, fue empleado por el ejército para la construcción y reparación de vehículos militares.
Durante los años de la guerra, Ascari, levantó una empresa de transportes, llevando combustible a Italia desde la costa Norte de Africa. Su socio en este negocio fue Luigi Villoresi, un piloto con el que su padre ya mantuvo algunas relaciones empresariales.
Hacia el final de la guerra Alberto era un hombre de familia, se había casado con Mietta y se había convertido en el padre de Patrizia y Antonio, así nombrado este último en honor al padre de Alberto.
Como padre de familia que era, Alberto había decidido no volver a competir, pero Villoresi lo animó a continuar. Y así, en 1949 ambos volvieron al equipo de Enzo Ferrari. En 1952, condujo su Ferrari 500 hasta la victoria, tras conseguir la primera posición en seis de las siete carreas que componían el campeonato de aquel año.
En 1953 de nuevo volvió a ganar con supremacía consiguiendo el primer puesto en cinco carreras y haciendo segundo en las restantes. Un gran corredor admirado por sus adeversarios, Ascari era un hombre sencillo divinizado por una legión de admiradores.
Pero en 1954, no fue una buena temporada para Ascari, su equipo de siempre no fue tan competitiva como en otras ocasiones y hasta en 4 ocasiones tuvo que abandonar la carrera por problemas en el coche. La temporada de 1955 no empezó mejor que la anterior, pues en dos ocasiones más tuvo que hacer Ascari sendos abandonos.
El segundo de los abandonos fue causado por un espectacular accidente en Mónaco, impactando en la zona del puerto tras fallar una de las chicanes.
Una semana más tarde al accidente de Mónaco, Ascari viajó a Monza para probar un modelo deportivo de Ferrari, era el 26 de Mayo.
Pero mientras probaba dicho vehículo, Ascari sufrió un accidente en una de las curvas más rápidas del circuito, provocándole la muerte. Actualmente la zona donde se produjo el accidente se llama Variante de Ascari y ahora en lugar de una curva hay una chicana izquierda-derecha-izquierda.Alberto Ascari fue el único piloto capaz de hacer frente al dominio de Fangio en la década de los 50.
