La marca alemana, que es parte de General Motors, también cuenta con problemas financieros aunque no son tan grandes como los de los americanos, por ello se dan cita en el Salón de Ginebra, donde presentarán su variante familiar del Insignia y nuevos motores ecoFLEX para ambas versiones.
La nueva motorización será de 2.0 litros CDTI que arroja 160 caballos de fuerza; además de ello, la mecánica y gestión electrónica del coche mejorará los consumos de combustible dejándolos en 5.3 litros por cada 100 kms, cosa que no suena nada mal, aunque es una cifra muy aventurada para un sedan de este tamaño.
La velocidad máxima de la unidad será de 218 km/h, con una aceleración de 0 a 100 de 9,5 segundos.
Un motor 1.6 litros turbo será el que ofrezca mejores desempeños al entregar 180 Cv controlados por una caja manual de 6 velocidades.
Gracias a la gran aceptación del diésel en Europa, se ofrece también un motor 2.0 biturbo de 190 Cv.
