EuroNCAP ha instituido un nuevo protocolo de evaluación para testear el grado de protección contra el latigazo cervical que ofrecen los vehículos ante una colisión trasera. Por primera vez, 25 vehículos fueron evaluados y el Volvo XC60 fue uno de los cinco modelos que recibieron la calificación más alta.
El procedimiento de evaluación incluye una serie de pruebas, entre las cuales la primera que se considera es la geometría del asiento que mide, por ejemplo, la posición de los apoyacabezas con el fin de determinar el tipo de protección. A continuación se realizan tres pruebas de choque trasero con distintos grados de severidad. Por último, se evalúan los resultados y el auto se clasifica en una escala de rojo, naranja y verde, que significan pobre, medio y bueno, respectivamente.
"Nuestro último modelo, el Volvo XC60, tuvo un buen desempeño en todas las pruebas y se le dio una calificación general de verde", contó Thomas Broberg, un experto en seguridad de Volvo Cars. El Volvo XC60 también recibió la máxima calificación en protección para los ocupantes: las cinco estrellas que otorga EuroNCAP en pruebas que incluyen impactos frontal y lateral.
El síndrome del latigazo cervical es uno de los tipos más comunes de lesiones de tránsito y se produce principalmente en colisiones traseras.
"Las lesiones del cuello se deben al rápido movimiento entre la cabeza y el cuerpo", explica Thomas Broberg, "por eso es vital que el Sistema de Protección Contra Latigazos Cervicales brinde apoyo total a la espalda y la cabeza, y ayude a la persona a mover la cabeza junto con el torso. El diseño del respaldo y de un apoyacabezas lo suficientemente alto y colocado cerca de la cabeza son también factores importantes", concluye.
Protección Contra Latigazos Cervicales (WHIPS)
Este año se cumple el décimo aniversario de WHIPS de Volvo. Esta tecnología se introdujo en 1998 en el Volvo S80 y desde 2000 constituye parte del equipamiento de serie en todos los modelos Volvo.
Es un sistema de protección, integrado en los asientos delanteros, que brinda soporte a toda la espalda del ocupante y su cabeza ante una colisión trasera. Amortiza el movimiento mediante elementos de deformación que absorben la energía y que se hallan ubicados entre el respaldo y el almohadón del asiento.
Si ocurre un choque en la parte trasera del vehículo, el respaldo sigue el movimiento del ocupante hacia atrás, a fin de reducir las fuerzas sobre el cuello y la columna vertebral.