Es adrenalina pura, una máquina espectacular. Es el Mustang construido de fábrica más potente de la historia de la marca.
Fue diseñado por el equipo de vehículos especiales de Ford (SVT) en colaboración con el especialista Carroll Shelby, toda una leyenda de la industria.
Posee un potente motor V8 de 32 válvulas de 5,4 litros y eroga una potencia máxima de 500 Cv.
El Ford Shelby GT 500 ofrece una suspensión delantera independiente del tipo MacPherson.
Además, el Shelby tiene una gran suspensión posterior de acoplamiento con los muelles en espiral y una barra de Panhard para el control exacto del eje trasero.
Los calibradores de Brembo de cuatro pistones fueron integrados a los rotores Brembo de 14 pulgadas, y los discos de 11.8 pulgadas en la parte posterior, continúan la herencia de SVT de Mustang.
